Ese parante en el arco sur del estadio Manuel Rivera es "hincha" fiel del José Gálvez. Evitó el gol de una probable derrota ante Sport Huancayo en el último minuto. Por eso los hinchas chimbotanos reaccionaron con violencia.
Terminado el encuentro, 1-1 con Sport Huancayo, los barristas del Gálvez esperaron a los jugadores locales afuera del estadio. Y les recitaron un sinnúmero de insultos y amenazas. Igual al técnico Rafo Castillo.
La poca paciencia de los espectadores molestó al preparador físico Willy Laya, quien los retó a pelear allí mismo. Es más, algunos jugadores respondían los insultos con más insultos.
"Lárguense con...", le gritaron a Rafo Castillo y a Laya. "Tienes que hacerlos correr a los jugadores, mi...", también les dijeron. "Malos de m...", arremetieron después contra los jugadores.
La riña se calmó cuando pasó el golero Ferreira. Fue el único aplaudido. El arquero salvó varias pelotas de gol.
El partido lo tenían controlado los galvistas, a pesar de las arremetidas de los huancaínos. Por el peso de la presión que ejercían en el área visitante, apareció el goleador chimbotano, Manuel Barreto, y anotó el 1-0, a los 26'.
En el complemento, Gálvez decayó en su juego, más con la salida de Cominges e Iriarte, lo que aprovecharon los visitantes para igualar a los 33', mdiante el joven cazador Irven Ávila.
Y eso no fue todo. Casi al final, un disparo de Omar Ramírez, que ingresó por Tovar, casi es gol. Hubiera ganado el equipo de Cubilla y habría sido peor para los chimbotanos.
Terminado el encuentro, 1-1 con Sport Huancayo, los barristas del Gálvez esperaron a los jugadores locales afuera del estadio. Y les recitaron un sinnúmero de insultos y amenazas. Igual al técnico Rafo Castillo.
La poca paciencia de los espectadores molestó al preparador físico Willy Laya, quien los retó a pelear allí mismo. Es más, algunos jugadores respondían los insultos con más insultos.
"Lárguense con...", le gritaron a Rafo Castillo y a Laya. "Tienes que hacerlos correr a los jugadores, mi...", también les dijeron. "Malos de m...", arremetieron después contra los jugadores.
La riña se calmó cuando pasó el golero Ferreira. Fue el único aplaudido. El arquero salvó varias pelotas de gol.
El partido lo tenían controlado los galvistas, a pesar de las arremetidas de los huancaínos. Por el peso de la presión que ejercían en el área visitante, apareció el goleador chimbotano, Manuel Barreto, y anotó el 1-0, a los 26'.
En el complemento, Gálvez decayó en su juego, más con la salida de Cominges e Iriarte, lo que aprovecharon los visitantes para igualar a los 33', mdiante el joven cazador Irven Ávila.
Y eso no fue todo. Casi al final, un disparo de Omar Ramírez, que ingresó por Tovar, casi es gol. Hubiera ganado el equipo de Cubilla y habría sido peor para los chimbotanos.
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